A quien de los presentes ya sea solteros ó casados no se hayan visto en posición tan comprometedora por algún comentario inocente que haces a las personas adulando su belleza y después alguien le comenta a tu fiera… digo amiga, esposa, novia ó amante, y se te arma la gorda… digo te metes en problemas.
Celos... y castigo
Décimas
Es que no me dices nada
y te haces desentendida,
Y me miras sorprendida
pareces nena chiflada;
Que nada, nada te agrada.
Por oír lengua mañosa
te pusiste muy celosa,
por qué yo adulé sus ojos
quítate de esos enojos;
Para mí tu eres hermosa.
Ahora yo ando sufriendo
por querer ser caballero
la mujer que yo más quiero,
y por ella ando muriendo
me dice que no la atiendo.
Al ver tus ojos bravíos
ya no quiero andar en líos
espero que lo recuerdes,
quien quiere unos ojos verdes…
Si tus cafés ya son míos.
De moraleja les digo
cuidado con lo que dicen
más vale que lo analicen,
porque aquí se los predigo
casi quedo de mendigo.
mas vale sean sinceros
Con pasión ser lisonjeros,
Que no hay mujer más bonita
s tu corazón no agita;
Y no andar de mujeriegos.
Moreno Hurtado 02/20/2014
Poemas a discreción, Los cuentos del abuelo