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Egocéntrico…
Egocéntrico…
Te recuerdo vestida de ese rojo,
te mirabas hermosa y muy sensual;
Casi un ángel hermoso terrenal,
al mirarme yo casi me sonrojo.
Un buen valtz en la fiesta comenzaron,
Alejandra por cierto se llamaba;
Invitando mí mano te mostraba,
mas tus ojos tan lindos se negaron.
Te miraba y quizás tú me evitabas,
No mirabas siquiera a mi lugar…Seductora de ojos, más te airabas
ni siquiera querías ya mirar;
Si vestida de rojo me invitabas…
El enigma no pude descifrar.
Ni mi vida, es soñar...
Y prendido a esos ojos seductores
con desdeño... He olvidado otros mejores.
Mortado 05/05/2014
Poemas a discreción, Los cuentos del abuelo
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